Page 108 - Manual deTécnicas y Procedimientos en Urgéncias de Pediatría para enfermería y medicina
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Manejo de la traqueostomía 87


Cuidado de la traqueostomía obstruida
La manera más sencilla de valorar una obstrucción de la cánula es obser-
vando que el niño tendrá voz (llanto audible), dificultad respiratoria y cianosis.
Se puede producir por diferentes causas:
– Exceso de moco.
– Mucosidad reseca.
– Cuerpo extraño.
Para poder valorarlo hay que observar bien al paciente o bien preguntar a
los cuidadores o padres sobre los signos que presenta el niño, existencia de tos,
signos de asfixia, cianosis o indicios de la presencia de alimento o líquido den-
tro de la cánula traqueal. Si se ha producido una aspiración hay que valorar y
tratar al niño como si se hubiera bloqueado la cánula.

Pasos
– Reconocer la urgencia: dificultad respiratoria, taquipnea, retracciones y dis-
minución de tonos respiratorios, posteriormente pasará a un estado más
grave de la situación (cianosis, diaforesis, agitación y bradicardia) y, final-
mente, el niño pierde la conciencia y desaparecen los movimientos de la
pared torácica y el pulso.
– Comprobar la colocación correcta de la cánula.
– Avisar al médico.
– Comprobar la vía aérea. Colocar la mano cerca del orificio traqueal y com-
probar si sale aire:
- Si sale aire: realizar lavado bronquial, ventilar con ambú y aspirar las
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secreciones.
- Si no sale aire: intentar aspirar, si no pasa la sonda, colocar nueva cánu-
la y ventilar al niño hasta que se recupere.
– Auscultar ambos pulmones.
– Monitorización de la saturación de oxígeno.
– Administrar oxígeno si precisa.
– Controlar signos vitales.

Cambio de cánula
– El primer cambio lo realiza siempre el cirujano.
– Comprobar la cánula auscultando ambos pulmones previo a la técnica.
– Oxigenar previamente y aspirar secreciones.
– Preparar dos cánulas de traqueostomía y tubos endotraqueales de igual
número y de número inferior, ya que, si existe dificultad, intentar introducir
la cánula de número inferior o tubo endotraqueal (Fig. 5).
– Tener preparado el equipo de reanimación.
– Precisa ayuda de otra persona y técnica estéril.
– Comprobar, si tuviese, que el balón de la cánula nueva no tiene fugas.
– Humedecer previamente la cánula nueva con suero salino estéril.
– Colocar un paño enrollado debajo de los hombros para hiperextender el
cuello.
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